El problema de la Filosofía

Al respecto de este tema, hay muchas posturas y comentarios. Comenzaré mi propuesta diciendo que, la Filosofía, etimológicamente, significa "amor a la sabiduría". Se deriva de Filos (Amor) y Sofía (Sabiduría). Pero la cuestión no termina ahi, al hablar de Filosofía, también se hace referencia a las preguntas fundamentales que se plantea el ser humano, como por ejemplo: ¿Qué es el hombre?, ¿Existe un más allá? ¿Hasta dónde podemos conocer?, ¿existe un Dios?, etc. También, a más de todos estos puntos de vista, se habla de un "quehacer filosófico", que engloba toda la actividad del hombre, para descubrir la naturaleza y descubrirse en ella; una especie de reflexión primera al estilo del los presocráticos, una especie de vocación a la filosofía, de la cual sólo eran participes los mejores hombres y más capaces. Así mismo se habla de que ese quehacer debe llevar al hombre a una madurez filosófica, es decir, a escudriñar por caminos no transitados, y plantear la reflexión de forma innovadora y dinámica. En efecto, la Filosofía no puede ser estática, no puede quedarse en la mera reflexión dialéctica, o en el supuesto innatismo cartesiano, sino que, mientras más dinámica sea, más acertadamente podrá dar respuesta a las continuas inquietudes y exigencias de este mundo cambiante.

Quisera hacer referencia a un aspecto interesante que encontré en el libro "El mundo de Sofía" de Jostein Gaarder, bajo el título ¿Qué es la Filosofía? En primer lugar, el hacer referencia a la Filosofía como una actividad esclusiva de ciertas personas, es acertada. No todas las personas pueden dedicarse a ésta labor. Sin embargo, su interés surge de algo que cuestiona a todos los hombres por igual. No es una necesidad que hay que cubrir, como el comer o el beber, es más bien un cuestionamiento más profundo que nos llama a dar respuesta a nuestra propia existencia y nuestra razón de ser en el mundo.

Toda esta compleja y retante experiencia, implica que de parte del hombre, exista la capacidad de interrogarse, y muy especialmente que exista la capacidad de ASOMBRO. Ese hecho de mirar las cosas del mundo, de la naturaleza, e incluso de uno mismo, con otros ojos.

Es entonces el momento de presentar un aspecto importante que marca la línea de nuestra reflexión anterior: EL MITO.

El mito es considerado como la fe del vulgo, una fe primaria, no racional ni empírica, más tradicional, que trata de dar una primera explicación a las cuestiones del mundo y a los interrogantes del hombre. Generalmente, se atribuía lo inexplicable a la acción de alguna divinidad. Este mito, fue el caldo de cultivo de los primeros pensadores.

Se habla posteriormente del salto del MITO al LOGOS. Esto quiere decir, que los primeros teólogos, que expusieron ciertas tradiciones basadas en las divinidades, nunca dieron explicación racional de sus ponencias, mientras otros pensadores pusieron de manifiesto explicaciones muy interesantes con una justificación racional.

Jorge Jiménez

Profesor.